Bitácora de Isabel Huete
SOLIDARIDAD CON HAITÍ
12 septiembre 2010
Nido de soledad (cuento mini)
Recorte de imagen bajada de internet
No sé si sabía lo que hacía cuando gritó aquello de ¡márchate y no vuelvas más! Porque se marchó y nunca más volvió. Ahora ella mira todos los días el camino que serpentea los campos de trigo y no alcanza a ver más que la sombra de los cuervos sobrevolándolos.
Soledad y poesía.
Publicado por
Isabel Huete
en
12:54
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
18 comentarios:
No, no sabía lo que hacia... Besotes, M.
Tenía que saberlo, no hay duda, Isabel.
Me alegra muchísimo, hoy domingo de fórmula 1, de día en casa, de relax antes del vértigo del lunes, volver a Isabel. A su letra, a su poesía, a sus cosas. Mucho. Un abrazo. Te tenía perdida. No era cierto.
Bueno, ¿lo sabía o no lo sabía? Jajaja. Me encanta que haya diversidad en la interpretación.
Emilio, querido amigo, nunca me pierdo del todo y desde luego jamás me pierdo para los amigos.
Gracias mil por estar ahí.
Un beso grande a ambos.
Bueno, y entonces, para que lo despidio??? Jeje, un cuento con la dimension exacta, un abrazo grande Isabel!!!
Hay palabras crudas que marcan el "nunca más"...hay que tenerlo en cuenta antes que lanzarlas al aire!
un abrazo.
Hola isabel.
Yo solo digo que me alegra saber de ti.
Deseo que te encuentres bien.
Recibe un abrazo, Montserrat
Y no por mini malo,
Muy bueno.
;)
Un abrazo
¡Qué horor! Se lo están comiendo los buitres... Me pregunto ¿'qué' era lo que se marchó? ¿Un hombre, una mujer, un niño, un perro? Magnífico e intrigante en tan contadas palabras. Siempre es bueno leerte, Isabel. Bueno tenerte de nuevo. Abrazo.
¿Tal vez un pájaro, echado del nido por su madre impaciente? Me quedé pensando...
Si, sabía lo que decía.
Lo que no sabía eran las consecuencias que acarrearían sus palabras.
Isabel, que se te echa en falta por esta vía.
Un besote enormeeeeeeeeee!!!!!!!!
La interpretación es libre, ha quedado claro y me encanta.
También me encanta reencontrarme con vosotr@s y sentiros tan cerca. Este diosito internet es increíble los lazos que crea y yo he tenido la suerte de enlazarme con gente maravillosa.
Un beso enorme a tod@s, amig@s.
Querida Isabel: Un cuento muy corto sí, pero me ha servido, para ver que sigues el curso bloguero, como tu bién dices. Se te echaba de menos, amiga.
pedir perdón ya no tiene sentido, supongo, o lo tiene pero ya no es aceptado.
¿Ve el camino? ¡Adelante!
Esa soledad que siempre nos acompaña, todos tenemos nuestro pequeño campo yermo....
Mil besos
Marian
Querida Isabel, me gusta tu hiper-mini relato. Yo creo que aunque le largara y se fuera, no debería arrepentirse, hay que aprender a convivir incluso con la soledad.
Pero bueno, dónde estás que no hay manera de localizarte, tienes ya nosecuantos mensajes míos.
Un besazo, chica fuerte.
Querida Isabel:
Me alegro de estar de nuevo en tu casa.
En este caso, si hubiera sabido la terrible soledad que le esperaba, no habría pronunciado jamás aquellas palabras.
Besos
Son cosas que se dicen y el otro las aprovecha para irse, creo yo.
LO que no se es si desear que quien se fue vuelva o no...
Beso.
Publicar un comentario